La Resistencia Islámica en Jordania: Un Nuevo Frente en la Región, sus Implicaciones y Desafíos.
La Resistencia Islámica en Jordania (المقاومة الإسلامية في الأردن) se ha consolidado como una organización militante clandestina que opera dentro del Reino Hachemita, respaldada por Kataib Hezbollah desde abril de 2024. Su surgimiento, en el contexto de un Medio Oriente convulso, no solo añade una nueva capa de complejidad al conflicto israelí-palestino, sino que también refleja la creciente influencia de Irán y sus aliados en la región.
El catalizador para la formación de la Resistencia Islámica en Jordania se atribuye al ataque aéreo israelí contra el consulado iraní en Damasco. Este incidente, que resultó en la muerte del comandante del IRGC Mohammad Reza Zahedi, desató una ola de indignación y llevó a Abu Ali al-Askari, figura clave de Kata’ib Hezbollah en Irak, a ofrecer su apoyo a la creación de una fuerza de resistencia en Jordania. La promesa de armar a 12.000 combatientes y proveerles con los medios necesarios para «defender a los palestinos y vengar el honor de los musulmanes» subraya la agenda central de este grupo: confrontar a Israel y proteger a la población palestina.
Acciones en el Terreno
Desde su aparición, la Resistencia Islámica en Jordania ha sido vinculada a varios actos de violencia, lo que ha elevado las alarmas en la región.
- Ataque en el Puente Allenby (8 de septiembre de 2024): Este incidente, en el que un camionero jordano perpetró un ataque en el cruce fronterizo, causando la muerte de tres civiles israelíes, marcó un punto de inflexión. La rápida felicitación de Kata’ib Hezbollah a la Resistencia Islámica en Jordania por esta acción confirmó la conexión entre ambos grupos y la creciente audacia de la organización jordana.
- Infiltración en Neot Hakikar (8 de octubre de 2024): La infiltración de militantes en territorio israelí y su posterior ataque a tropas israelíes evidenciaron la capacidad de la Resistencia Islámica en Jordania para llevar a cabo operaciones más allá de las fronteras jordanas.
Implicaciones Políticas y Regionales Profundas
La Resistencia Islámica en Jordania se enmarca dentro de una estrategia más amplia del denominado «Eje de Resistencia», liderado por Irán. Este eje busca expandir su influencia en la región, utilizando a Jordania como una plataforma para desestabilizar a Israel y apoyar a facciones palestinas en Cisjordania.
Esta situación plantea serias interrogantes sobre el futuro de Jordania como mediador en el conflicto israelí-palestino y sobre la estabilidad de la región en su conjunto. La presencia de un grupo militante activo en Jordania, con vínculos con Irán, podría alterar el equilibrio de poder y generar una escalada de violencia.
La reacción a la aparición de la Resistencia Islámica en Jordania ha sido diversa. Internamente, el gobierno jordano se enfrenta al desafío de mantener el orden y evitar que el país se convierta en un campo de batalla. La prohibición de los Hermanos Musulmanes en abril de 2025, tras un supuesto complot de sabotaje, refleja la preocupación del gobierno por el aumento de la radicalización y la inestabilidad.
A nivel regional e internacional, la comunidad internacional observa con cautela la evolución de los acontecimientos. Las potencias occidentales, en particular Estados Unidos, han expresado su preocupación por la influencia de Irán en Jordania y han instado al gobierno jordano a tomar medidas para contrarrestar la amenaza.
Desafíos y Perspectivas
La Resistencia Islámica en Jordania presenta una serie de desafíos para la región y para la comunidad internacional.
- El riesgo de una escalada de violencia: Las acciones de la Resistencia Islámica en Jordania podrían desencadenar una escalada de violencia entre Israel y Jordania, así como entre Israel y facciones palestinas.
- La amenaza a la estabilidad de Jordania: La presencia de un grupo militante activo en Jordania podría desestabilizar el país y socavar la autoridad del gobierno.
- El aumento de la influencia de Irán: La Resistencia Islámica en Jordania es un instrumento de la política regional de Irán, que busca aumentar su influencia en el Medio Oriente.
El futuro de la Resistencia Islámica en Jordania y su impacto en la región dependerán de una serie de factores, incluyendo la evolución del conflicto israelí-palestino, la política regional de Irán y la capacidad del gobierno jordano para mantener el control de la situación.
En conclusión, la Resistencia Islámica en Jordania representa un nuevo y peligroso actor en la ya compleja escena del Medio Oriente. Su presencia plantea desafíos significativos para la estabilidad de la región y para la comunidad internacional.