Casa Árabe expone, con el apoyo de la Embajada de Túnez en España, una exposición sobre el arte pictórico tunecino desde el día 7 de mayo hasta el 27 de julio que, también, está acompañado por diferentes conferencias y ayer fue la de Mohamed Sami Bechir, profesor del instituto superior de Bellas Artes de Susa y artista visual multidisciplinar y habló sobre el arte tunecino y la cultura andalusí.

La exposición aborda el trabajo de varios pintores de alto nivel del país, desde Ali Guermassi (1923-1992) hasta Ali Bensalem (1910-2001) o Safia Farhat (1924-2004) entre otros.

Las obras, por lo que esta exposición nuestra, se basa en el descubrimiento de la propia identidad tunecina con la independencia y el redescubrimiento de la nación como telón de fondo, pero también las tensiones entre la narrativa tunecina de la vuelta a la identidad con los experimentos artísticos del siglo XX y XXI.

Desde obras costumbristas, algunas muy identificables para el espectador mediterráneo, con escenas sociales como en el cuadro el Peluquero de Ali Guermassi hasta escenas propias del arte abstracto, pero incluso en ese mundo difuso de la abstracción, el artista tunecino tiene el sello de su patria en la forma de elementos geométricos, azulejos o la tan bella, pero compleja caligrafía árabe.

El uso de la luz, un bien tan definitorio en el mediterráneo se convierte en otro protagonista en estas composiciones pictóricas que recuerdan a Joaquín Sorolla.

La evolución de Túnez y su identidad pictórica no es un elemento aislado sino un elemento que bebe de las tradiciones propias, del resto del mundo árabe tanto en el Magreb como en el Masrek así como de Europa y las tendencias mundiales.

El arte moderno, en paralelo a la evolución social del país se ha consolidado y ha demostrado sus capacidades.

En definitiva, es una exposición que merece ser visitada.
¿Donde verla?: En Casa Árabe, Madrid: C. Alcalá, 62, Salamanca.
¿Hasta cuando?: 7 de mayo – 27 de julio.